No seré yo el que defienda a Ricardo Costa, Richi para sus amigos, pero cortando su cabeza no se acaba con la crisis del Gobierno de la Generalitat, ni la crisis del PP y por supuesto, tampoco se acaban las responsabilidades ante el caso Gürtel.
Eso si, si Costa dimite, o lo cesan, o se lo cargan (como sea que lo hagan) al menos, por fin, este Gobierno de la Generalitat habrá aceptado alguna responsabilidad respecto a sus posibles acciones irregulares. La impunidad ante todos los delitos que se les imputan a dirigentes del PP y al circo montado en la Generalitat unicamente provoca el desprestigio de la clase política y del sistema democrático.
Artículo – Camps decide prescindir de Costa