Hoy, mientras trabajaba, he recibido la mala noticia de que nos dejaba. Ha sido un referente en la lucha por una economía y una sociedad más justa y solidaria. Muere la voz que caló en ese mayo español, en la spanish revolution.
«El 15 de mayo ha de ser algo más que un oasis en el desierto; ha de ser el inicio de una ardua lucha hasta lograr que, efectivamente, ni seamos ni nos tomen por “mercancía en manos de políticos y banqueros”. Digamos NO a la tiranía financiera y sus consecuencias devastadoras»
Si dijera que José Luis Sampedro consiguió indiganarnos, nadie se plantearía que él fuera el motivo de dicha indignación, sin duda Sampedro ayudó y potenció que varias generaciones, pero en especial (me atrevo a decir) mi generación, abriéramos más los ojos y nos indignáramos ante una sociedad injusta, ante una economía cruel de mercado potenciadora de las desigualdades sociales y ante este modelo político que tanto nos abochorna.
«Lo que mas me indigna es la indiferencia con que se contemplan las cosas, en general. Y en los dirigentes, la ignorancia y la soberbia»
A estas palabras de Sampedro solo puedo añadir que para honrar el legado que nos deja debemos trabajar para acabar con la indiferencia en la sociedad, con la ignorancia y la soberbia en el gobierno y con las desigualdades e injusticias en nuestro mundo. Debemos, como dijo muchas veces, convivir en paz todos juntos.
José Luis, allá donde estés, muchas gracias.
Vivir es urgente 